Digan lo que digan, me encanta vivir en Caracas.
Hay tanto por hacer, cine, teatro, propuestas gastronómicas.
La posibilidad de subir en teleférico a El Ávila, de quedarse en Galipán, de descansar del día a día.
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| Foto por Brida |
Posada de Teresa, atendida por Teresa aunque nunca supe realmente quién era. Una casita súper acogedora hecha de piedras y madera. Nuestra habitación era pequeña, pero cómoda. Me encantó el espejo, enmarcado en madera rústica. Muy cerquita escuchábamos un chivito que nos recordaba lo lejos que estábamos del caos citadino.
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| Foto por Brida |
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| Foto por Brida |
¿Qué mejoraría? la calidad de la lencería, un mejor jabón de tocador, colocaría una cortina en la regadera (yo particularmente hice un reguero cuando me bañé) y botellitas de agua en cada habitación.
¿Lo que más me gustó? Las antigüedades, adornos rebuscados, flores de colores, neblina que va y viene, la sutil vista del Mar a lo lejos.
Por ahora no tienen TV en las habitaciones, aunque sí tienen varios en el área de restaurante y amenizan con música en las zonas comunes.
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| Foto por Brida |
De las dos posadas que hasta ahora conozco en Galipán:
- Si tienes bajo presupuesto, vas en plan familiar o quieres subir por el teleférico... Posada de Teresa ((0212) 3242220, 3957801, 8319936, (0416) 8248639), te brinda una buena opción
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| Foto por Brida |
- Si andas en plan romanticón, puedes pagar un poco más por una cabaña más íntima y deseas degustar un desayuno de dioses, te recomiendo Terraza D'Avila (http://www.terrazadavila.com/) sin pensarlo dos veces
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